Ahora bien, que nosotros (Daxium) equipemos a los empleados móviles de las empresas con Apps B2B, no significa que no tengamos derecho a hablarte de adicción digital, ¡al contrario! Este verano, vamos a ayudarte a disfrutar al máximo de tus vacaciones, con tus amigos, hijos, padres… pero con comunicación analógica.
Traducción: nos hablamos, nos miramos, nos sonreímos, como hacían nuestros antepasados, junto a la chimenea o con una copa de rosado, pero dejando el smartphone en un lugar fresco de tu habitación. Y por qué no probar el reto de coger un bolígrafo Bic (suena raro decir esa palabra) y pegar un sello en una postal. Es posible, funciona, y se está volviendo tan raro e inusual que tus amigos conectados lo considerarán «perturbador». Traducción: una forma innovadora de comunicarte que sorprenderá a los que te rodean. ¡Efecto sorpresa garantizado!
Los emoticonos en tus mensajes de texto o de WhatsApp son cosa del pasado. Atrévete a ser aventurero poniendo freno a tus publicaciones de Instagram para tus 1.792 amigos y 17.580 amigos de tus amigos. No digo que lo dejes todo, porque sería como pedirle a un fumador empedernido que lo dejara de la noche a la mañana. Aunque este fumador adictivo también puede pasarse a los cigarrillos electrónicos, pero ése es otro tema.
Un poco de introspección:
¿Qué tipo de usuario digital eres? ¿Un poco, mucho, apasionadamente? ¿Tienes idea de cuántas horas pasas con tu smartphone? ¿1 hora, 3 horas o más de 5 horas al día? Un consejo: corre (con el dedo) a descargar la aplicación «Momento» y verás la magnitud del daño, o mejor dicho, tu grado de adicción. Esta aplicación gratuita te dirá con qué frecuencia utilizas tu injerto digital (me refiero a tu smartphone).
¡El veredicto es a menudo implacable y aterrador! ¡Utilizo el móvil más de lo que debería! Miro más a mi pantalla que a mis seres queridos. ¿Tengo que consultar la previsión meteorológica a 7 días vista cuando esta mañana hace sol? ¿Necesito consultar frenéticamente las fotos de mis amigos en Facebook, a algunos de los cuales no veo ni sé nada de ellos desde hace 10 años? ¿Realmente necesito leer o responder a mis correos electrónicos del trabajo cuando estoy de vacaciones, cuando nadie me espera y quizás incluso podría dar vacaciones a mis colegas o compañeros que se han quedado en la fábrica? ¿Tus amigos, incluso los de verdad, pensarán que te has quemado si te liberas de toda comunicación digital durante 4 horas? Todos tenemos la respuesta. ¡Los smartphones pueden volvernos locos! Es una gran bola y una cadena. ¡Nos hipnotiza!
Víctimas consentidas…
Todos nos hemos convertido en víctimas de la tecnología digital, que nos aprisiona en su perversa red de pantallas intrusivas. Quien no se sienta concernido, ¡que me lance el primer tweet! Un consejo: ¡vive la revolución del verano y conviértete en un adicto analógico durante unas horas al día mientras estés de vacaciones!
Algunas ideas: tenis, ciclismo (sin asistencia eléctrica), natación (sin medusas con descargas eléctricas), la playa (smartphone apagado), senderismo (sin una aplicación GPS ni un reloj que te diga lo lejos que has llegado), leer un auténtico libro de papel, kitesurf (motor = viento), meditación (sin música en Deezer), una siesta, una copa con los amigos o la familia.
Acabo de probarlo durante 3 días. ¡Se puede hacer!
… ¡Felices vacaciones analógicas a todos!